Las personas que se auto-lesionan aprenden que al hacerse daño logran aliviar un estado emocional agobiante; es por esto que la auto-lesión es un mecanismo para manejar emociones.
¿Por qué el autolesionarse hace sentirse mejor a algunas personas?Hay varias razones, y la respuesta es una mezcla de ellas. Por un lado reduce tensión y por otro es un método que tiene la gente para manejar emociones fuertes las cuáles no han aprendido a manejar de mejor manera.
El autolesionarse hace que el nivel de tensión tanto psicológico como fisiológico regrese a un estado que se puede soportar.
Cuando una persona siente una emoción negativa muy fuerte y no sabe como manejarla, aprende que al hacerse daño reduce ese sentimiento de incomodidad en el que se encuentra de manera inmediata. A lo mejor se sienten mal después de hacerlo, pero por lo menos ya no tienen esa sensación de desesperación intensa; digamos que es sentirse mal pero en calma.
Esto explica el porqué el autolesionarse puede ser adictivo: Funciona. Cuando tienes una manera rápida y fácil de hacer que las cosas malas desaparezcan por un rato, ¿por qué tratar de encontrar una manera más tardada y que requiere más esfuerzo para lograr lo mismo? Sin embargo, a la larga, las consecuencias negativas de este comportamiento se van sumando y la gente pide ayuda.
No todos tenemos la oportunidad de aprender a manejar las emociones de manera efectiva.
No nacemos sabiendo cómo expresar y manejar nuestras emociones; lo aprendemos de nuestros padres, nuestros hermanos, nuestros amigos, maestros y la gente que nos rodea.
Un factor que es común para la mayor parte de la gente que se hace daño, haya o no sufrido de algún abuso, es la invalidación. Aprendieron, desde una edad muy temprana, que la interpretación de sus emociones y sus sentimientos acerca de lo que les rodea estaban equivocados e inclusive eran "malas". Aprendieron que ciertos sentimientos no estaban permitidos, dándose casos donde se les castigaba por tenerlos.
Al mismo tiempo, la gente que tenía una fuerte influencia sobre ellos, no tenía a su vez buenos mecanismos para manejar sus propias emociones. Uno no puede aprender a manejar efectivamente situaciones de tensión, a menos que crezca y se desenvuelva con personas que manejan estas emociones de manera efectiva y positiva. ¿Tú crees que podrías aprender a cocinar si nunca has visto a alguien cocinando?
Aunque es común que la gente que se autolesiona haya sufrido algún tipo de abuso, no todos los que se hacen daño han sufrido abuso. Hay veces que la invalidación de sentimientos y la falta de una buena guía para manejar las emociones es suficiente para que se de esta conducta.
Los neurotransmisores ¿podrían tener algo que ver?Así como se ha visto que la manera en que el cerebro utiliza la serotonina juega un papel en la depresión, algunos científicos piensan que problemas con el sistema de la serotonina puede predisponer a algunas personas hacerse daño, haciéndolas ser un tanto más agresivas e impulsivas que la mayoría de la población.
La tendencia hacia el impulso de agresión, combinada con la creencia que las emociones están mal o equivocadas, puede llevar a voltear la agresión hacia uno mismo. Y una vez que la persona se hace daño, se da cuenta que esta conducta reduce su nivel de tensión y el ciclo comienza.
¿Qué tipo de gente se autolesiona?Las personas que se autolesionan vienen de todos los diferentes medios. La gente que se hace daño pueden ser hombres o mujeres; con estudios de postgrado o que solamente cursaron la primaria; ricos o pobres; de cualquier país; heterosexuales, homosexuales o bisexuales. Algunas personas que se autolesionan logran funcionar de manera efectiva en puestos muy altos y demandantes; pueden ser maestros, terapeutas, médicos, abogados, ingenieros, trabajadores. Algunos tienen alguna discapacidad. La edad varía desde la preadolescencia hasta entrados los sesenta años; unos más jóvenes, otros más grandes.
De hecho, la incidencia de la autolesión es muy similar a la de los desórdenes alimenticios, con la diferencia que al ser una conducta altamente estigmatizada, la mayor parte de la gente esconde cuidadosamente sus marcas, sus cortadas o ampollas. También tienen muchas excusas que se pueden sacar de la manga cuando alguien les pregunta de las cicatrices (¡hay muchos gatos mañosos rondando por la ciudad!)
La gente que deliberadamente se hace daño, ¿no serán realmente psicóticos?No más que las personas que ahogan sus penas en una botella de tequila. El hacerse daño es un mecanismo, al que se le suma el agraviante que no es entendido por la mayor parte de la gente y no es tan aceptado y conocido como lo es el alcoholismo, la drogadicción, la anorexia, bulimia, el fumar, el trabajo en exceso, y los demás tipos de mecanismos que usa la gente para evadir sus emociones.
Entonces, ¿es otra manera de describir un fracaso de intento de suicidio?
No. Las personas que se inflingen daño físico normalmente lo hacen para intentar mantener su integridad psicológica: es una manera de no suicidarse. A través de hacerse daño, logran acabar con emociones insoportables y una presión agobiante, lo cual reduce el deseo de suicidarse. Y aunque hay casos de personas que se autolesionan y que en algún momento intentan suicidarse, casi siempre utilizan un método diferente al usual para hacerse daño.
La autolesión es un mecanismo inapropiado para manejar situaciones conflictivas, es una forma de mantenerse vivo, de sobrevivir. Desgraciadamente, hay gente que no comprende esto, y piensan que obligarlos y coartarlos de no hacerlo es la única forma para lidiar con una persona que se hace daño. La hospitalización, especialmente a la fuerza, puede hacer más daño que bien.
¿Se puede hacer algo por la gente que se autolesiona?Se están realizando investigaciones con medicamentos que estabilizan el humor, alivian la depresión, y calman la ansiedad; en algunos casos se ha reportado que estos medicamentos ayudan a que el paciente ya no se haga daño.
Hay diferentes tipos de terapia psicológica que se han desarrollado y se siguen desarrollando para ayudar a los que se hacen daño a aprender nuevos mecanismos que les permitan manejar sus emociones, y así enseñarles técnicas apropiadas como alternativas a la auto-lesión. Este trabajo terapéutico se basa en que una vez que el paciente entiende sus patrones de auto-violencia y se estabiliza, entonces se puede empezar a trabajar con los problemas que subyacen a la auto-lesión.
Esto no implica que se deba de obligar a los pacientes a no hacerse daño. Cualquier intento de reducir o controlar la cantidad de auto-lesiones que una persona se hace, debe de estar basada en el deseo del paciente en emprender el difícil trabajo que es controlar o parar el auto-daño. El tratamiento no debe de estar basado en los sentimientos y creencias personales del profesional sobre la conducta de auto-lesionarse.
La autolesión evoca muchas emociones incómodas en la gente que no lo hace: repulsión, enojo, miedo, disgusto, entre otros. Si un profesional no se siente capaz de manejar sus propias emociones acerca de la autolesión, entonces tiene la obligación a sí mismo y al paciente de referirlo con otro que pueda hacer el trabajo. Además, tiene la responsabilidad de estar seguro que el paciente entiende que el referirlo es debido a su propia incapacidad de manejar la auto-lesión, y no con ninguna posible singularidad del paciente.
Las personas que se hacen daño, lo hacen generalmente debido a una dinámica interna, no lo hacen para molestar, enfurecer o irritar a otros. El autolesionarse es una respuesta conductual a un estado emocional y usualmente no se hace para frustrar al profesional. En las salas de urgencias, la gente con heridas hechas por sí mismos, se les dice directa o indirectamente que no merecen el mismo trato que alguien que se lastimó de manera accidental. Son tratados de manera grosera por el mismo doctor que trataría de manera amable a una anoréxica que llega debido a un desmayo. El médico debe de ser consciente que una herida de una persona que se auto-lesiona responde a un sufrimiento psicológico y por ende debe de tratarse como trataría una herida accidental.
La auto-lesión es una conducta para manejar emociones insoportables.