jueves, 30 de diciembre de 2010

Consejos: ¿como ayudar a un enfermo de anorexia, bulimia u otro TCA?

Para Ayudar a Alguien con un Trastorno Alimenticio

Los trastornos alimenticios pueden estar entre las aflicciones que para los miembros de la familia, son más difíciles de entender. Son comunes los sentimientos de frustración e impotencia. Un diagnóstico y tratamiento oportuno puede salvar la vida de una persona con un trastorno alimenticio, pero es importante recordar que sólo un doctor o terapeuta con experiencia los pueden tratar eficientemente. 

Si la persona ha perdido más del 25 por ciento de su peso corporal normal, o usted siente que su vida está en peligro, busque atención médica inmediatamente. Los siguientes son algunos consejos útiles si alguien que usted conoce está sufriendo de un trastorno alimenticio. 



Sí.

Edúquese. Lea todo lo que pueda sobre trastornos alimenticios. Esto le ayudará a entender el problema y ponerle en una mejor posición para ayudar a aquellos a su alrededor.

Escuche. Muchas veces nos sentimos avergonzados y solos. Su apoyo puede proporcionar la fortaleza que necesita la persona para buscar ayuda profesional.

Aliente a la persona a obtener ayuda. Trate de hacer que la persona busque ayuda profesional, pero no presione demasiado. Esto sólo los alejará. 


No.

Importune a la persona regañándola sobre el comer o no comer. Las personas con trastornos alimenticios están extremadamente conscientes de sus hábitos alimenticios. Al molestarlas con regaños, usted sólo conseguirá que se sientan más incómodas y reforzará el comportamiento.

Esconda la comida para evitar que la persona coma compulsivamente. Aunque las personas con bulimia o con un trastorno de alimentación compulsiva tal vez pidan su ayuda, esconderles la comida sólo creará resentimientos.

Obligue a la persona a comer. Obligar a la persona a comer hará que él o ella se sienta pueril, fuera de control, no aceptado(a) y regañado(a). Una vez más, esto sólo refuerza el comportamiento.

Busque ayuda

Un trastorno alimenticio es una enfermedad que es difícil de entender. Identificarla y tratarla también puede ser difícil. Pero entre más pronto sea diagnosticada la persona, hay más probabilidades de que se recupere. 


Aunque no puede obligar a una persona a buscar ayuda, usted puede educarse a sí mismo(a) y desarrollar un sistema de apoyo para aquellos cercanos a usted que puedan estar en riesgo.

El testimonio de Evelin: de la anorexia a la bulimia

mujer de rojo llorando El testimonio de Evelin: de la anorexia a la bulimiaHola me llamo Evelin tengo 15 años y todavia no puedo creer q este haciendo esto..entrar en una pagina para averiguar sobre bulimia, sobre mi enfermedad.. Todo empeso desde principio de año, va en realidad el complejo con mi cuerpo lo tengo desde q tengo uso de razon, pero a principio la obsecion por bajar de peso,llego hacerme odiar la comida, pase de comer mucho, a comer poco a no comer nada.

Mi mamá fue la q se dio cuenta de esto, por lo mucho q habia bajado de peso y por lo deprimida q estava..me levantaba y no veia las horas de volverme a acostar, caminaba pensando en como no morirme hoy, millones de pensamiento q sin darme cuenta todo se devia ala comida, pero mi mama si se dio cuenta, y me llevo a un hospital, donde hace ahora 4 meses q estoy haciendo un tratamiento, q me sirvio mucho, porque anorexica ya no soy mas, pero lo q nadie sabe y no me animo a decirles, porq lo unico q quiero es salir del tratamiento, es q ahora en ves de no comer, como pero vomito todo, siento tanta asco de mi misma cuando como asi q no tengo otra opcion q vomitarlo, aunq siempre me jure q sera la ultima vez..

Tengo miedo, de no poder salir mas de esto, miedo de quedarme sola, tengo mucho miedo porq la unica q sabe q hago esto soy yo y no lo puedo controlar, y me da miedo decirselo a mis terapeutas o a mi mama, porq no quiero causarles mas problemas a nadie, no quiero q ninguna persona mas sufra por mi, y contandoles esto no se..estaria desilusionando a muchas gente, ello piensan q ya estoy bien, q pronto voy a salir de esto, q falta poco..pero yo siento que estoy peor q nunca y q esto no se acabará mas… gracias por escuchar.

domingo, 26 de diciembre de 2010

Trastorno alimenticio que implica ansiedad, adicciones y depresión

El doctor Alberto Espina Eizaguirre, del Servicio Andaluz de Salud de Torremolinos, ha participado en la última jornada del curso de verano de la Universidad, con una charla titulada "La impulsividad en la bulimia nerviosa".



Bajo el título de La impulsividad en la bulimia nerviosa, ha señalado la baja autoestima como principal factor causante de esta enfermedad. 

La bulimia nerviosa es conocida como un trastorno alimentario grave, pero no es el único, también conlleva muchos otros trastornos añadidos aunque no tan conocidos
Eizaguirre ha mencionado como principales la depresión, trastornos de ansiedad, adicciones y trastornos de personalidad. Por lo tanto, no es suficiente con que el enfermo “aprenda a comer”, sino que es un proceso mucho más complejo. 


Las personas que padecen bulimia nerviosa tienen una conducta impulsiva caracterizada por abusar de sustancias como drogas y alcohol y por ser sexualmente promiscuas , con el riesgo que ello conlleva. 



Con frecuencia también llevan a cabo autoagresiones e incluso pueden llegar al intento de suicidio. El doctor ha afirmado que un tercio de las mujeres que padecen bulimia han sufrido abuso sexual. 



Estas experiencias traumáticas "se guardan en un cofre". Es un hecho tan impactante para la psique que cuando algún estímulo externo les hace recordarlo, la persona "se queda en un estado de estupor" y revive la ansiedad que tuvo cuando sucedió. 



Cuando una persona padece algún tipo de trastorno alimenticio es más vulnerable al estrés, a la impulsividad y a sufrir trastornos afectivos
Además “la malnutrición altera muchísimo la mente”. Esa preocupación por el cuerpo y por el peso le lleva a ayunar, a hacer un uso abusivo de laxantes y en ocasiones de diuréticos. La persona siente hambre, se da un atracón de comida y posteriormente siente una sensación de culpa y ansiedad que le lleva a vomitar. 



Todo ello provoca en ella un aumento de la inestabilidad afectiva y de la impulsividad. Este ciclo bulímico, tal y como ha señalado Eizaguirre, hay que cortarlo y lo tiene que entender la paciente y la familia. 



La impulsividad se da en un gran número de trastornos: afectivos, de personalidad o trastornos de la propia imagen corporal. Es un síntoma importante porque “la persona corre grave riesgos” y hay que “contenerle para que no se dañe por esa impulsividad”.



La bulimia multiimpulsiva es de hecho una de las más graves y una de las que requiere de unos programas mucho más elaborados. Son personas con la personalidad muy alterada y con “un trastorno depresivo muy severo”.



La clave de la impulsividad está en la serotonina, neurotransmisor cerebral encargado de regular el estado de ánimo. Incide mucho en la concentración, en el sueño y en la depresión. Con bajos niveles de serotonina, se dan muchos cambios del estado de ánimo y la depresión siempre está presente. 



Sobrevaloración de la imagen corporal hoy día y la búsqueda de aceptación por parte de los demás
Si yo siento que por dentro no valgo nada, voy a ver “si siendo como la sociedad actual dice que debo ser, alguien me acepta” La persona no se siente querida, siente un vacío emocional e intenta llenarlo con cosas” cuando quisieran llenarlo con afecto” 



El doctor ha comentado los diferentes programas que llevan a cabo en su centro, como terapias de control del vómito o trabajos corporales. A lo largo del tratamiento se toman diferentes medidas para quitar el dolor y sufrimiento al paciente para dar tiempo a que el proceso haga efecto y la persona se cure.



lunes, 20 de diciembre de 2010

Consejos para superar la anorexia o la bulimia


Las personas que padecen un trastorno alimentario, como la Anorexia o la Bulimia se ven inmersas en un mundo del que sienten que no pueden escapar, como si estuvieran dentro de un pozo oscuro, sin luz y sin salida,pero esto no es así.
Para recuperar lasaludy poder llevar una vida normal y saludable es fundamental la ayuda de los especialistas, de lafamiliay la colaboración sincera y absoluta del propio enfermo.
Como sabemos que no es fácil enfrentar este problema hoy daremos algunos consejos para quienes sufren de un trastorno alimentario y desean salir adelante(Estos son extractos del  libro “Anorexia y Bulimia”de la psicóloga Julia Buckroyd.)
Consejos de auto ayuda para quienes padecen de un trastorno alimentario
  • Como primer medida debes aceptar que tienes un problema, en general esto les resulta más fácil a los que sufren de bulimia ya que no se sienten a gusto con los atracones y el vómito compensatorio.
  • En cambio quienes padecen deanorexiano quieren reconocer su enfermedad porque el no comer o el hacerdietasmuy estrictas les da una cierta satisfacción.
  • Debes poner todo de tí para renunciar al mal uso de la comida, es importante que estés más a favor que en contra de esto. Toda recuperación pasa por altibajos, pero si deseas realmente salir adelante podrás superar cualquier contratiempo.
  • Si estás dentro de un peso normal tienes que proponerte con firmeza, mantenerloy no bajar ni un gramo más; en el caso de que tu peso sea muy bajo no podrás emprender un programa de auto ayuda, necesitarás la colaboración de un grupo de especialistas ya que tanto médica como piscológicamente estás incapacitada para luchar sola.
  • El apoyo de lafamiliaes fundamental, deben ayudarte práctica y psicológicamente. No descartes a tus padres y demás seres queridos habla de frente, sincérate y pídeles su auxilio y contención.
  • En caso de que no cuentes con ellos ni con otra persona cercana debes buscar asistencia profesional, ya que salir de esta enfermedad no es nada fácil y no es una tarea que puedas emprender en soledad, se necesita la asistencia continua de otra persona.
  • La auto ayuda y la colaboración familiar son opciones eficientes a la hora de enfrentar un trastorno alimentario en personas que no tienen problemas psicológicos graves. Pero en los casos en que la enfermedad está muy avanzada, si la persona sufre de depresión, adicciones o se auto mutila es imprescindible la cooperación de profesionales.
  • Si esta es tu situación emprender sola la tarea de recuperarte será muy difícil ya que debes poner en orden muchas cosas y eso es demasiado.

domingo, 19 de diciembre de 2010

RECUPERARSE DE ANA Y MIA

¿Se puede una persona con un desorden alimenticio recuperar de su enfermedad?
Definitivamente SI, la recuperacion de un transtorno alimenticio es totalemente posible.
La recuperacion de un transtorno alimenticio no es solamente tener el peso adecuado a nuestra altura, abarca factores tanto fisicos como psicologicos, asi como un crecimiento personal y una re-educación en nuestros hábitos.
Se considera que una persona se ha recuperado cuando:
EN EL ASPECTO FISICO:
  • Peso normal a su talla
  • Digestión normal
  • Menstruación normal
  • Termorregulación normal (No te pasas con suéter todo el tiempo)
  • Pelo y piel sin resequedad
  • Regulación de las funciones metabólicas


EN CUESTION DE HABITOS:
  • Realización de ejercicio regularmente y en forma moderada
  • Hábitos de comida BALANCEADA, VARIADA, SUFICIENTE
  • Ausencia de vómitos
  • Ausencia de abuso de laxantes
  • Capacidad de reconocer niveles normales de hambre y saciedad
  • Capacidad de comer normal tanto en eventos sociales como al estar totalmente solo
  • Saber relajarse
  • Tener actividades recreativas
EN CUESTION PSICOLOGICA:
  • Ausencia de miedo, ansiedad y pensamientos obsesivos o compulsivos sobre el peso y la comida
  • Elevar la autoestima y auto-aceptación
  • Sanar una infancia difícil
  • Restablecer y recuperar si es posible, lazos familiares dañados
  • Asumir la responsabilidad sobre la propia salud, la vida y el futuro
  • Llevar una relación saludable con la sexualidad
  • Saber tolerar el rechazo
  • No aceptar el abuso
  • Saber reconocer y validar pensamientos y sentimientos propios
  • Haber aclarado las propias creencias religiosas o espirituales
  • Aprender a expresar sentimientos y comunicarse efectivamente en periodos de conflicto o sufrimiento
Como vez es un camino largo hacia la recuperación, pero es un camino que vale la pena seguir.
La recuperación no es algo que se de de un día a otros, los especialistas afirman que el tratamiento de un desorden alimenticio necesitara entre 1 y 2 años para llevarse acabo.
Aun después de la recuperación existe un muy alta posibilidad de tener recaídas, pero esto no debe ser desalentador, las recaídas no son volver a empezar de cero, ya que después de un tratamiento se tienen muchas mas herramientas para enfrentar la enfermedad y resulta mas sencillo sobreponerse.
¿Qué se necesita para recuperarse de un trastorno alimenticio?
Cada persona es única y diferente, el proceso de recuperación va a ser distinto para cada uno. Primero y antes que nada hay que saber pedir ayuda y dejarse ayudar, definitivamente se requiere de mucha paciencia, auto-motivación por que es un camino lleno de tropiezos.
Pasar por todo el proceso de recuperación también te ayuda a enfrentar la vida de una forma distinta, conocer tus propias capacidades, y afrontar el día a día con entusiasmo y valor.

viernes, 17 de diciembre de 2010

Estudio revela aumento de suicidios en mujeres con anorexia

  • Las chicas que sufren de esta enfermedad tienen hasta cinco veces más probabilidades de morir por patologías gastrointestinales
Anorexicas poseen 11 veces más posibilidades 

que las personas sanas de fallecer
 por enfermedades respiratorias. A. CAMACHO
Las mujeres que sufren de anorexia se encuentran más expuestas a morir a lo largo de toda su vida que las chicas que no sufren de este trastorno
CIUDAD DE MÉXICO.- Las mujeres que sufren de anorexia se encuentran más expuestas a morir a lo largo de toda su vida que las chicas que no sufren de este trastorno, sin embargo las causas que provocan la muerte no se tenían bien entendidas, éstas pueden ser naturales o no como el suicidio, accidentes u homicidios.
Otras más son las patologías por el abuso del alcohol, enfermedades respiratorias y urinarias, según reveló un estudio realizado por Fotios Papadopoulos,en el estudio se analizaron seis mil nueve casos de mujeres fallecidas que habían sido ingresadas al menos una vez en su vida por culpa de la anorexia durante los años 1973 a 2003.En la investigación se prometió averiguar los factores que pueden predecir el aumento del riesgo de defunción.
En España se tienen registrados 500 mil casos de anorexia, lo cuáles ocurren entre los 10 y 29 años, según una publicación de Elmundo.es del día de hoy.
"Este el primer estudio que analiza con detalle todas las causas de mortalidad en estas pacientes, con una media de edad de 19 años, en su primera estancia hospitalaria. Aunque, y como es lógico, la anorexia nerviosa en sí se ha posicionado como la primera razón de fallecimiento prematuro en las afectadas, también hemos podido establecer otras causas, máxime cuando se valora que en un 20% de los casos la patología se cronifica",mencionó el investigador.
El número de anoréxicas fallecidas a lo largo de la investigación fue de 265. De todas ellas, 126 murieron por causas no naturales, la mayoría por suicidio, según publica la revista 'British Journal of Psychiatry'.
"Nuestro estudio confirma las cifras que establecen que quitarse la vida está detrás del 20% al 30% de las muertes entre estas pacientes más graves. Ellas se quitan la vida con una frecuencia 13 veces mayor que las mujeres sanas", indicaron los autores de la investigación.
En los casos de muerte natural , la principal responsable fue la enfermedad, con un 21% de muertes, la segunda causa de muertes fue por abuso de sustancias psicoactivas, sobre todo el alcohol,"La dependencia a lo largo de la vida de las bebidas alcohólicas más que de otras drogas ha sido siempre muy común en estas pacientes" advirtió el doctor Papadopoulos.



Debido a esto, las chicas que sufren de esta enfermedad tienen hasta cinco veces más probabilidades de morir por patologías gastrointestinales, como cirrosis sobre todo.
Estas enfermas poseen 11 veces más posibilidades que las personas sanas de fallecer por enfermedades respiratorias y 10 veces más por patologías urinaria.
"Los factores que pronostican un aumento de las posibilidades de fallecer están relacionados con la edad de la paciente (cuanto más mayores son más riesgo poseen) y con el hecho de haber sido ingresadas por culpa de la anorexia en más de una ocasión", informaron los investigadores.
Uno de los hallazgos que ha sorprendido a los propios autores del estudio es que "hemos contabilizado menos defunciones por culpa del corazón de las esperadas."
Ante esta buena noticia, se añade que la mortalidad por anorexia ha disminuido en las últimas dos décadas,  "Recientemente, y gracias a los avances en los tratamientos y al mayor conocimiento y control de las complicaciones médicas asociadas a la enfermedad, así como a la mejora en la terapia psicológica de este trastorno y de otros problemas mentales asociados, se ha producido un descenso en la mortalidad por causas naturales y no naturales" afirmaron.
Todo esto a sido gracias a que la detección de la patología ha sido más pronta y hay nuevas terapias.

Ansiedad y depresión, factores detonantes de la Anorexia y bulimia


  • Los trastornos alimenticios han rebasado las fronteras de la edad
Es común que los trastornos alimenticios se asocien con mujeres en etapa de adolescencia
GUADALAJARA, JALISCO.- Los trastornos alimenticios han rebasado las fronteras de la edad. Menores de 10 años son atendidos por las consecuencias del miedo a engordar “Tanto la anorexia como la bulimia, se dan por grados de ansiedad y depresión que los niños tienen en su casa”


Es común que los trastornos alimenticios se asocien con mujeres en etapa de adolescencia, quienes presentan un alto grado de preocupación por su imagen corporal. Sin embargo, el problema ha rebasado las fronteras de la edad, y actualmente existen niños menores de 10 años que padecen anorexia, bulimia o algún otro trastorno de este tipo.



La anorexia es un padecimiento en el cual el afectado come cada vez menos y excluye de su dieta alimentos que considera que engordan. En la bulimia, los pacientes restringen la comida, pero al tener hambre consumen en exceso, lo que los lleva a provocarse el vómito o usar laxantes.



La Clínica de Trastornos de la Conducta Alimentaria del Antiguo Hospital Civil “Fray Antonio Alcalde”, atendió en diciembre de 2007 a cuatro niños de edades entre los siete y 10 años, a los que se diagnosticó bulimia y anorexia.



Aun cuando la cifra parece insignificante, es un signo de alarma para los especialistas en la materia.



Las cifras de la enfermedad suelen ser poco confiables en el Estado, pues las instituciones privadas no rinden una estadística oficial, como lo hacen los hospitales públicos, por lo que se desconoce el número de pacientes que se atienden de manera privada.



La encargada del área de psicología de la Clínica de Trastornos de la Conducta Alimentaria, Lourdes de la Mora Cornalla destaca que la incidencia de casos en niños se debe principalmente a la dinámica disfuncional en que viven.



“Tuvimos dos niñas y dos niños de entre siete y 10 años, quienes fueron traídos por sus madres. Ellos expresaban que no querían estar gordos, porque mamá nunca fue gorda y porque se burlaban de ellos en la escuela. Para nosotros es un índice alto porque antes no se daba en niños, y menos en un sólo mes”.



Las dos pequeñas presentaron problemas de bulimia, y los dos niños tenían anorexia. El que hayan recibido un diagnóstico oportuno permitió que con tratamiento psicológico y nutricional, sin necesidad de hospitalización controlaran sus problemas alimenticios.



De acuerdo con De la Mora Cornalla, en lo que va del año se han atendido 40 casos de anorexia y bulimia; tres de ellos en niños. Una infante de siete años con bulimia, y dos niños de nueve años con anorexia. Ninguno de ellos requirió ser hospitalizado.



La pequeña no era gorda, aún tenía cuerpo de niña. Su madre trabajaba como edecan y era de complexión muy delgada, por lo que su hija quería parecerse a ella, así que comenzó a vomitar y dejó de comer hasta que su madre se dio cuenta y acudió al hospital.



“Estos problemas, tanto la anorexia como la bulimia, se dan por grados de ansiedad y depresión que los niños tienen en su casa. El que sus padres no estén al pendiente de ellos, que no tengan cuidados, que no se interesen en lo que sienten, son factores para que los niños intenten este tipo de conductas”.



De la Mora Cornalla recomienda a los padres mantener interacción con los hijos, y tener la responsabilidad de inculcarles una dieta balanceada. Cabe destacar que cuando un niño se preocupa mucho por su peso, expresa rechazo hacia ciertos alimentos, deja de comer o come en exceso, aunado a conductas extrañas, quiere decir que algo anda mal, por lo que se debe acudir con un especialista y exponer el caso.

sábado, 11 de diciembre de 2010

Anorexia y bulimia: mentiras en la red que llevan al ´infierno´



Hace 20 años empezaban los primeros casos de trastornos alimenticios. Los pacientes eran sólo mujeres y las más pequeñas tenían 16 años. Ahora los sufren niñas de 9, niños desde los 11 y en la web hay sitios que bajo los nombres de ´Ana´ y ´Mía´ engañan a jóvenes diciéndoles que estos trastornos no causan la muerte, sino que son un estilo de vida



CINTHYA SÁNCHEZ

El Universal
Sábado 28 de octubre de 2006




"Creo en la lista de calorías como palabra suprema y de acuerdo con esa creencia la memorizaré. Creo en las básculas como indicador de mis fracasos y éxitos diarios. Creo en el infierno porque en ocasiones creo que vivo en él. Creo en la negación del cuerpo y en una eterna vida de ayuno". Oración presente en la mente día y noche. Está con ellas en la cama y las obliga a la báscula para descubrir aterrorizadas que están en los mismos 40 "asquerosos" kilos.

Se hacen llamar las princesas Ana y Mía. No son dos personas, no son dos mujeres: son muchas, quizá cientos, miles. Utilizan ambos nombres para bautizar sus males dándoles personalidad propia: la anorexia y la bulimia.
"Yo soy Ana, yo soy Mía. ¿Tú qué eres?". Es la tarjeta de presentación de las "princesas" que ventilan en la red sus trastornos alimenticios.

Para entrar al peligroso mundo Ana o Mía, las jóvenes deberán contestar un cuestionario de registro en internet como este: "Nombre: Luego lo revelaré. Edad: 15. ¿Cuánto mides?: 1.75. ¿Cuánto pesas?: 70. Peso ansiado por conseguir: 40. ¿Eres Ana o Mía? Ana. ¿Desde cuándo? A los 11 años. ¿En qué se basa tu dieta diaria? Té por la mañana y la noche, cigarrillos y chicles. ¿Cómo te escondes para que nadie lo sepa? Les digo que comí mucho en la escuela". La pregunta más aterradora: "¿Te sientes orgullosa de ser Ana o Mía?". Sí, en la mayoría de las respuestas.

La alerta

Hace 20 años se presentaron los primeros casos de trastornos alimenticios en el Instituto Nacional de Nutrición. Los pacientes eran solamente mujeres y las más pequeñas tenían 16 años. "Hoy recibimos niñas de nueve años con problemas de anorexia o bulimia. Son pequeñas muy preocupadas por su figura y su peso; además vemos otro fenómeno nuevo: varones desde 11 años con trastornos alimenticios", explica el doctor Armando Barriguete, siquiatra y especialista en trastornos de la alimentación del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán.

Asegura que en los últimos cinco años han aumentado el número y la intensidad de estos males. "Los hombres pasaron de 1.8% a 3.8%, y las mujeres de 6% a 9% de casos que responden a conductas en las que podemos sospechar que hay un trastorno de la alimentación", dice.

Lo preocupante, agrega, es que los menores de edad con trastornos alimenticios recurren frecuentemente a las páginas de internet "pro Ana y pro Mía" a mal informarse, pues los consejos de dietas, medicamentos y técnicas para perder peso son completamente erróneos.

Disfrazan la verdad


La "Carta Ana" es la bienvenida a muchas de las páginas web. Comienza con una presentación: "Permíteme presentarme. Mi nombre es anorexia, pero también puedes llamarme Ana. Te voy a decir un secreto: tus papás están decepcionados de ti. Su hija, con tanto potencial, se ha convertido en una grasienta. Pero estoy a punto de cambiar todo eso. No voy a permitirte comer mucho. Esto va a empezar despacio: leerás las etiquetas de nutrición, disminuirás la entrada de comida hasta llegar al ayuno completo. Baja esa panza gorda. Si decides no aguantar más y decirle a alguien cómo te hago vivir, todo el infierno se acabará, pero vas a perder, idiota. Sinceramente: Ana".

No rebasan los 18 años. Se reúnen en foros por internet para hablar de dietas, medicamentos, tips para quemar calorías y para engañar a los padres y sicólogos. Son jóvenes de todo el mundo. Lo mismo está Maryavril, de España, que Princesaza de Argentina, o Miaunena de México, sobrenombres que utilizan para ocultar su identidad.

Se dan ánimos para alcanzar juntas la meta de sentir la piel pegada al hueso. Se apoyan durante el ayuno. Hacen carreras de pérdida de kilos y tienen sus propias tablas de masa corporal. Sin embargo, estas páginas evitan hablar de la verdad.

"Los adolescentes sufren cuadros de ansiedad y depresión muy profundos de los que poco se habla en esos foros. No se platica la parte de tristeza, soledad y sufrimiento en el que viven", explica el doctor Barriguete.
Y añade: "Se les engaña manifestando que la salud es sinónimo de un cuerpo sin grasa y longilíneo, es decir, sin forma. "Son conceptos erróneos. Estás páginas fomentan mucho que es a través de la restricción de comida como se puede alcanzar salud o el triunfo. Se manejan con conductas destructivas sin saber que esto puede disparar estados de ansiedad, de culpa y depresión".

Las visitantes de estos sitios web firman sus participaciones en los foros con frases "motivadoras" como esta: "Nadie dijo nunca que llegar a ser una princesa fuera sencillo" o "No importan los medios que uses mientras los resultados sean geniales; para qué comer si después te sientes una mierda".

Se exigen un peso ideal. Han creado sus tablas de masa corporal. En el mundo Ana, una joven que mide 1.50 metros debe pesar 34 kilos, y una de 1.63 metros, 41 kilos; de lo contrario, se llaman "cerdas" en vez de "princesas".

Las experimentadas inician a las primerizas con consejos como este: "Para los mareos acuéstate en un lugar oscuro, sin ruido y cómete un chicle sin azúcar. Cuenta las calorías de todo y trata de consumir un aproximado de 500 diarias. Si tus amigas te dicen cosas feas, no les hagas caso, es envidia".

Intercambian correos electrónicos para ponerse en contacto por Messenger y apoyarse en los momentos graves del ayuno, el cual empieza con un día y va aumentando hasta lograr los 28, meta en la que creen que habrán perdido todo músculo.

Los consejos para engañar a los psicólogos: "Bébete dos litros de agua con laxantes antes de visitarlo, así pesarás dos kilos más de lo que en realidad pesas y dile que ya se te antoja el chocolate".

El siquiatra recomienda a los papás estar alerta a señales que dan los niños y que pueden hablar de la existencia de un trastorno alimenticio. "Hay tres señales que se pueden identificar fácilmente: si el niño o la niña le preocupa mucho la alimentación, el peso y la figura, hay que alerta para evitar un trastorno alimenticio".

Saber qué tipo de información manejan los menores a través de la red, también ayuda, pues las páginas contienen mensajes aterradores. "Un trauma comienza con aquello a lo cual uno está expuesto, pero por inmadurez no puede digerir y las páginas son el ejemplo de eso".

CIRUGÍA, NUEVA ALTERNATIVA ANTE ANOREXIA Y BULIMIA

Rafael Mejía


Ambos padecimientos responsables de casos alarmantes en donde los pacientes se someten a métodos autodestructivos para bajar de peso, tienen una nueva posibilidad de tratamiento cuando todos los recursos conocidos han fallado: una intervención quirúrgica que permite controlar los síntomas y mejorar la calidad de vida.
Aunque en México no contamos con estadísticas precisas que muestren el porcentaje de personas con anorexia (pérdida de peso por dejar de comer) o bulimia (episodios repetidos de excesivo consumo de alimentos seguidos de vómito o uso de laxantes), los especialistas reconocen que la incidencia de ambas condiciones se ha incrementado dramáticamente en fechas recientes, ante todo por la difusión de estereotipos de belleza basados en la delgadez. Así, varios estudios han mostrado que 60% de las adolescentes están insatisfechas con su constitución física, a pesar de cumplir con parámetros normales.
Cabe aclarar que la falta de cifras confiables no es exclusiva de nuestro país, ya que la mayoría de las personas que sufren estos trastornos ocultan sus síntomas para no ser descubiertas. A pesar de ello, algunos cálculos conservadores muestran que la anorexia se presenta en 1% de la población mundial y la bulimia en poco menos del 3%, siendo las mujeres de 11 a 30 años el grupo más afectado en ambos casos.
En términos generales, la persona que sufre uno o los dos padecimientos puede adoptar conductas inimaginables con tal de reducir tallas, pues se encuentra obsesionada con el sobrepeso y la imagen que tiene de su propio cuerpo está distorsionada. No es extraño que se someta a dietas rigurosas, a jornadas excesivas de ejercicio y consuma laxantes (favorecen el tránsito intestinal) o diuréticos (permiten eliminar orina), y desafortunadamente hay ocasiones en que los síntomas son tan severos que no se logra una recuperación satisfactoria, incluso aunque se lleve a cabo el tratamiento adecuado.
Sobre este último punto, un grupo de especialistas del Centro Médico Nacional 20 de Noviembre, perteneciente al Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), localizado en la Ciudad de México, ha desarrollado exitoso procedimiento quirúrgico “que mejora la condición de pacientes con problemas severos de anorexia y bulimia; en un principio, este método se desarrolló para tratar a pacientes agresivos, pero descubrimos que en general podía funcionar para enfermedades en las que se presentan depresión, ansiedad y comportamiento obsesivo-compulsivo (pensamientos y sentimientos fijos y recurrentes, además de patrones de conducta repetitivos) que no mejoran con los métodos habituales”.
Tal es la explicación del Dr. Óscar Meneses Luna, quien forma parte de este equipo de trabajo y ahonda al respecto: “Desde 2003 iniciamos la preparación de la primera intervención, efectuada a principios de 2005, y para ello nos basamos en literatura médica que documenta casos atendidos de manera similar en otros países. También se debe mencionar que realizamos valoraciones exhaustivas de la paciente en áreas como Neurología, Psiquiatría y Psicología, apoyados en un sistema de neuronavegación (software o programa especial para computadora) que nos permite obtener y analizar imágenes de los tejidos neuronales”.
Precisión milimétrica
La región cerebral en que se lleva a cabo esta cirugía es el sistema límbico, el cual se localiza en la zona central del cerebro y se relaciona con la actividad emocional. Además, “se sabe desde hace tiempo que esta vía se vincula con problemas obsesivo-compulsivos, y trabajos realizados desde 1934 en Chile y otros países han permitido la localización de una serie de regiones o blancos neuronales donde se debe intervenir”.


Las operaciones iniciales de este tipo eran muy rudimentarias en comparación con las actuales, pues ahora se cuenta con equipo mucho más sofisticado y preciso.
El Dr. Meneses Luna detalla que el primer paso a seguir en esta técnica es la realización de estudios de resonancia magnética (sistema que utiliza campos magnéticos para obtener gráficos del interior del organismo desde múltiples perspectivas, con gran nitidez y en tercera dimensión) y tomografía (examen especial de rayos X que permite contar con imágenes “en rebanadas”), cuyos resultados deben analizarse con ayuda de una computadora para localizar las regiones en donde se practicará la neurocirugía (la cual es realizada por el Dr. Manuel Hernández Salazar).
Una vez que el paciente es trasladado al quirófano, “se le anestesia y se le coloca un marco o anillo estereotáxico, es decir, un instrumento que se fija en la cabeza y que se encuentra graduado como una regla; está hecho de un material especial (titanio, por ejemplo), y sirve tanto para montar el equipo con que se trabajará como para dar una ubicación exacta de las zonas en que se tiene que intervenir”.
A continuación se realizan dos pequeñas incisiones en el cráneo (trépanos), y a través de ellas se introducen dos “agujas” muy delgadas, de punta roma (no cortan), que se denominan electrodos. Se verifica que su localización sea la correcta y se procede a emitir descargas de calor que interrumpan las conexiones neuronales que se localizaron desde el principio, logrando con ello el mejoramiento de los síntomas obsesivo-compulsivos.
Sobre este hecho aclara el psiquiatra: “La recuperación no es inmediata, sino que deben pasar aproximadamente 6 meses después de la cirugía para ver los resultados en plenitud (nadie sabe por qué ocurre esto, pero así es), y aunque hasta el momento hemos tenido muy buenos resultados, siempre existe el riesgo de que las conexiones que se interrumpieron vuelvan a generarse o de que los alcances de este método sean más modestos de lo esperado”.
También aclara que en todos los casos se debe continuar con el tratamiento psicológico y el uso de medicamentos, aunque es evidente que se requerirán en dosis mucho menores y que el nivel de vida mejora notablemente.
A pregunta expresa, el Dr. Meneses indica que esta neurocirugía se reserva “para pacientes con síntomas refractarios o de difícil control, como intentos de suicidio, carácter violento y depresión severa, mismos que no pueden ser controlados con medicamentos ni terapia de apoyo psicológico. Por otra parte, también se indica en personas con casos muy graves de trastorno obsesivo-compulsivo, depresión y agresividad”, siempre que se descarten otros problemas que pudieran generar las alteraciones en la conducta y el estado de ánimo, epilepsia o tumores cancerosos.
Los riesgos de la intervención son los mismos de una cirugía habitual, es decir, que se presente alguna hemorragia o infección, además de efectos adversos hacia la anestesia. “Fuera de eso no representa mayor problema y el paciente puede ir a su casa en un par de días, una vez que se hayan descartado los riesgos posoperatorios”.
Futuro promisorio
El Dr. Óscar Meneses explica que este tipo de neurocirugía se practica en al menos tres centros hospitalarios de México, pero para atender casos de anorexia o bulimia sólo se realiza en el Centro Médico Nacional 20 de Noviembre. “Hasta la fecha, nuestro grupo de trabajo, que involucra a unas 20 personas (incluyendo a neurólogos, psicólogos, neurocirujanos y psiquiatras), ha realizado dos intervenciones en pacientes con trastornos de alimentación, y seis más para disminuir la agresividad asociada a retraso mental o esquizofrenia (Enfermedad psiquiátrica en la que se alteran el comportamiento, la personalidad y los pensamientos del paciente, quien se siente perseguido y pierde la noción de la realidad.)”.


El especialista confía en que este procedimiento quirúrgico logrará la mejoría de muchos pacientes cuyos síntomas obsesivo-compulsivos son muy severos, pero especifica que en nuestros días “todavía enfrenta alguna resistencia y es mal visto, incluso por parte de psiquiatras y otros médicos, porque se piensa que puede afectar a la capacidad intelectual y habilidades físicas del paciente. Sin embargo, nos respaldan la precisión de los recursos tecnológicos que se utilizan y, más aún, los resultados que hemos obtenido”.
Por último, Meneses Luna asegura como conclusión: “Considero que la neurocirugía es una alternativa real que podemos ofrecer en casos graves de bulimia y anorexia, pues he sido testigo de la notable mejoría en pacientes con síntomas depresivos que incluso trataban de suicidarse mientras estaban en hospitalización. Ahora se les ve mejor anímica y físicamente, inclusive con una vida sentimental estable”.

jueves, 9 de diciembre de 2010

ANOREXIA EN NIÑOS Y NIÑAS

La anorexia es un Trastorno de la Conducta Alimentaria
La anorexia es un trastorno de la alimentación que se caracteriza porque el niño, aunque tenga apetito, se niega a comer. Los niños y niñas con anorexia tienen inapetencia. 


Las personas con anorexia están obsesionadas por ser delgadas. No quieren comer y tienen miedo de aumentar de peso. Pueden estar continuamente preocupadas por cuántas calorías ingieren y por cuánta grasa tiene lo que comen. Pueden tomar tabletas para dieta, laxantes o diuréticos para bajar de peso. Pueden hacer demasiado ejercicio. Los anoréxicos usualmente piensan que están gordos a pesar de que están muy delgados. Las personas con anorexia pueden llegar a estar tan delgadas que pueden parecer como que están enfermas.


Causas de la anorexia en los niños

Psicológicas (sobre todo cuando hay una relación conflictiva con la madre), Orgánica (debido a una enfermedad subyacente que provoca inapetencia), o Funcional (una alteración en el desarrollo del hábito alimentario.

Tratamiento de la anorexia
Reeducación de los hábitos alimentarios del niño. Y en los demás casos, consulta a un médico especialista.Los Trastorno de la Conducta Alimentaria de grado clínico o cerca de convertirse en comportamientos extremos requieren ser atendidos por un grupo de  profesionales preferiblemente con experiencia.



El tratamiento más duradero y efectivo para los Trastorno de la Conducta Alimentaria es alguna forma de psicoterapia con atención médica manejo nutricional. Idealmente este tratamiento debe ser individualizado y variar de acuerdo a la severidad del desorden y de los problemas particulares, necesidades y capacidades del paciente y su familia.




El tratamiento típico se basa en el paciente pero también incluyen terapias individuales, de grupo y de familia. Medicamentos psiquiátricos, grupos de apoyo, o terapias informativas sobre nutrición son tratamientos adjuntos que pueden ser beneficiosos para algunos pacientes.

La hospitalización se recomienda cuando el Trastorno de la Conducta Alimentaria ha causado problemas físicos que pueden poner en peligro la vida de la persona o cuando Trastorno de la Conducta Alimentaria está asociado con severas disfunciones psicológicas o de la conducta.

En algunos casos el tratamiento puede convertirse en una larga y costosa batalla. A veces, a pesar de los mejores esfuerzos, el tratamiento podría resultar no exitoso. En estos casos los individuos se mantienen crónicamente sintomáticos o aún más trágico la muerte puede ocurrir como resultado del daño físico o psicológico. Por esta razón el mejor tratamiento implica la prevención de estas complicaciones.


Prevenir los Trastorno de la Conducta Alimentaria como la Anorexia
Informarte lo más posible sobre la anorexia. La poca información puede llevar a evaluaciones o comportamientos erróneos relacionados al comer, la figura y los Trastorno de la Conducta Alimentaria.



Hay que desalentar la idea errónea de que una dieta en particular o llegar a tener un peso y talla particular lleva automáticamente a la felicidad y a la plenitud.


Si crees que su hijo o hija padece de Trastorno de la Conducta Alimentaria expresa tu preocupación de una manera franca y cuidadosa. Sutilmente pero con firmeza busque ayuda profesional.



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